Pedro B. Palacios fue un Maestro y poeta cuyo seudónimo más conocido fue “ALMAFUERTE”, bajo ese seudónimo escribió estas líneas que, más que poesía son cartas de navegación para estos días…

El 15 de abril fue día de pagos y decisiones, mientras nuestra oficina permanece cerrada nosotros trabajamos desde casa, los compromisos no esperan y menos la renovación del contrato anual de arrendamiento de CódigoCero, mismo que ayer celebramos, también pudimos pagar a nuestros colaboradores, aunque nos asusta no recibir pagos con la puntualidad y certeza que antes, confiamos en que saldremos adelante.

Lo hicimos como un voto de confianza primero entre Gaby y yo, luego hacia nuestros colaboradores que han sido solidarios y comprensivos como nunca antes y paralelamente a nuestros clientes, de quienes agradecemos su apoyo infinitamente.

Hace días nos agüitamos, no hay apoyos para nosotros en ningún nivel gubernamental, no perderemos el tiempo en buscarlos, nuestra única opción es no dejar de trabajar, estar en movimiento, por ello CódigoCero no cierra, no quiebra, no desaparece, CódigoCero es una idea, es una filosofía, una utopía que comparto hace años con mi compañera de vida pero es principalmente producto del esfuerzo de Gaby quien es la fuerza de liderazgo detrás de la empresa, gracias a ella es que CódigoCero sigue en pie, gracias a su esfuerzo y el de todas y todos quienes siguen con nosotros.

Ayer fuimos a nuestra oficina, está sola y llena de polvo, nos prometimos visitarla el fin de semana para limpiarla y dejarla preparada para lo que sigue y así lo haremos, aquí no se raja nadie.

¡¡¡ AVANTI!!!
Si te postran diez veces, te levantas
otras diez, otras
cien, otras quinientas…
No han de ser tus caídas tan violentas
ni tampoco por ley, han de ser tantas.
Con el hambre genial con que las plantas
asimilan el humus avarientas,
deglutiendo el rencor de las afrentas
se formaron los santos y las santas
Obsesión casi asnal para ser fuerte,
nada mas necesita la criatura.
y en cualquier infeliz se me figura
que se rompen las garras de la suerte…
¡ todos los incurables tienen cura
cinco segundos antes de la muerte!
¡¡¡PIU AVANTI!!!
No te des por vencido, ni aun vencido,
no te sientas esclavo, ni aún esclavo;
trémulo de pavor, piénsate bravo,
y arremete feroz, ya mal herido.
Ten el tesón del clavo enmohecido,
que ya viejo y ruin vuelve a ser clavo;
no la cobarde intrepidez del pavo
que amaina su coraje al primer ruido.
Procede como Dios que nunca llora,
o como Lucifer que nunca reza,
o como el robledal, cuya grandeza
necesita del agua y no la implora…
¡que muerda y vocifere vengadora
ya rodando en el polvo tu cabeza!
ALMAFUERTE